El uso del Big Data y todo lo que podría supone si se aplica al sistema sanitario no es un camino repleto de rosas. Actualmente existen algunos claroscuros que hacen referencia a qué pasaría si pudiéramos utilizar de una forma plena a partir de hoy mismo esta tecnología, porque algunos aspectos, tanto legales como prácticos, no favorecen el uso de la tecnología Big Data todavía tal y como se concibe la misma.
En este sentido, son ya varios los proyectos e iniciativas que intentan aportar luz a la integración de esta tecnología a la salud, como el I Congreso Nacional de Wearables y Big Data en salud, que se celebra el 18 de noviembre en Madrid, y donde se aclararán muchas cuestiones que ahora están sobre la mesa. A continuación vamos a enumerar los que consideramos algunos de los puntos que pueden crear incertidumbre sobre el uso de la tecnología Big Data:
Marco regulatorio
No está claro cómo va a ser el procesamiento de los datos de muchos pacientes usando la tecnología Big Data ni el nivel de anonimato. Actualmente el procesamiento de datos de requiere la tecnología Big Data se enmarcaría dentro de la Ley Orgánica de Protección de Datos. Y esta a su vez implica un anonimato total de las personas a quienes pertenecen esos datos. Cualquier uso de estos datos de forma ilegal (cesión, consulta, mercantilización, etc.) por parte de terceros no autorizados podría incurrir en un incumplimiento de la legislación actual. El proceso de datos debe ser anonómimo y la tecnología Big Data debe cumplir la deseada privacidad de los usuarios.
Financiación
El modelo de negocio del Big Data en salud aún no está definido de una forma estándar. Ahorrará costes a las organizaciones sanitarias, estará capacitada para preveer posibles comportamientos de los pacientes, etc. Pero ¿Cuál será el modelo de negocio de esta tecnología cuando esté en su plena aplicación?
Transparencia
No solo debe asegurar la privacidad de los datos, sino también debe asegurar la transparencia en la utilización de esos datos. La sociedad debe estar informada de las ventajas y los riesgos que pueda suponer el procesamiento de datos a través de tecnología Big Data.
Herramientas
La tecnología Big Data necesita de herramientas creadas para poder utilizar, transformar, analizar y en definitiva procesar esos datos. Ya se están utilizando algunas y en España tenemos algunos ejemplos, pero aún así existe una necesidad de crearlas, testarlas, probarlas y reprobarlas para poder ejecutar procesos con esta tecnología a gran escala. En muchos casos los sistemas actuales son incapaces de procesar la información que el Big Data propone. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Quién? Faltan aún respuestas.
Equilibrio
Es necesario un equilibrio entre la recopilación de información y el análisis de la misma. Por motivos obvios, actualmente se están destinando más recursos a la recopilación de la información que al análisis de la misma, lo que puede crear un desequilibrio de base en la aplicación de esta tecnología que desenfoque el objetivo final.
¿Crees que la tecnología Big Data aún tiene muchos puntos que levantan cierta incertidumbre? ¿Echas de menos alguno más?
En este sentido, son ya varios los proyectos e iniciativas que intentan aportar luz a la integración de esta tecnología a la salud, como el I Congreso Nacional de Wearables y Big Data en salud, que se celebra el 18 de noviembre en Madrid, y donde se aclararán muchas cuestiones que ahora están sobre la mesa. A continuación vamos a enumerar los que consideramos algunos de los puntos que pueden crear incertidumbre sobre el uso de la tecnología Big Data:
Marco regulatorio
No está claro cómo va a ser el procesamiento de los datos de muchos pacientes usando la tecnología Big Data ni el nivel de anonimato. Actualmente el procesamiento de datos de requiere la tecnología Big Data se enmarcaría dentro de la Ley Orgánica de Protección de Datos. Y esta a su vez implica un anonimato total de las personas a quienes pertenecen esos datos. Cualquier uso de estos datos de forma ilegal (cesión, consulta, mercantilización, etc.) por parte de terceros no autorizados podría incurrir en un incumplimiento de la legislación actual. El proceso de datos debe ser anonómimo y la tecnología Big Data debe cumplir la deseada privacidad de los usuarios.
Financiación
El modelo de negocio del Big Data en salud aún no está definido de una forma estándar. Ahorrará costes a las organizaciones sanitarias, estará capacitada para preveer posibles comportamientos de los pacientes, etc. Pero ¿Cuál será el modelo de negocio de esta tecnología cuando esté en su plena aplicación?
Transparencia
No solo debe asegurar la privacidad de los datos, sino también debe asegurar la transparencia en la utilización de esos datos. La sociedad debe estar informada de las ventajas y los riesgos que pueda suponer el procesamiento de datos a través de tecnología Big Data.
Herramientas
La tecnología Big Data necesita de herramientas creadas para poder utilizar, transformar, analizar y en definitiva procesar esos datos. Ya se están utilizando algunas y en España tenemos algunos ejemplos, pero aún así existe una necesidad de crearlas, testarlas, probarlas y reprobarlas para poder ejecutar procesos con esta tecnología a gran escala. En muchos casos los sistemas actuales son incapaces de procesar la información que el Big Data propone. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Quién? Faltan aún respuestas.
Equilibrio
Es necesario un equilibrio entre la recopilación de información y el análisis de la misma. Por motivos obvios, actualmente se están destinando más recursos a la recopilación de la información que al análisis de la misma, lo que puede crear un desequilibrio de base en la aplicación de esta tecnología que desenfoque el objetivo final.
¿Crees que la tecnología Big Data aún tiene muchos puntos que levantan cierta incertidumbre? ¿Echas de menos alguno más?