Algunos hospitales españoles han incluido dentro de su
estrategia de comunicación muchas de las redes sociales implantadas en nuestro
país para interactuar con sus pacientes, pero casi ninguno se
ha planteado todavía llevar a cabo acciones directamente en Instagram. El único y que de momento (que hayamos localizado) tiene presencia en esta plataforma es la Clínica Universidad de Navara, que ha subido 14 fotos corporativas desde 2011 a su perfil. ¿Por qué hasta ahora no ha calado en este sector como sí en otros? ¿Miedo a ser malinterpretados o a no saber qué comunicar? ¿Quién será el primero que seguirá los pasos del uso que le están dando los hospitales americanos?
Como ya ha pasado con algunas redes focalizadas en la
imagen, en el ámbito de la sanidad cuesta que se las vea como herramientas de interacción con los pacientes o con los propios profesionales sanitarios. En el caso concreto de Instagram, no había despertado un excesivo interés comercial tras su nacimiento en EE UU a
finales de 2010. Pero todo cambió cuando algunas estrategias bien llevadas a cabo por grandes cadenas textiles y de restauración pusieron de manifiesto que si podía existir un filón para que los usuarios encontraran puntos de conexión.
Sin embargo, este concepto, de entrada, estaba alejado del ámbito sanitario.
Pero una imagen, como reza el dicho, vale más de mil palabras, y tiene una
capacidad muy rápida de transmitir emociones, de entusiasmar y de captar
detalles que de otra forma pasarían desapercibidos, pero que no por ello son
menos importantes. Precisamente ahí reside la magia de Instagram: con una foto
es capaz de unir a personas que se vean identificadas bajo lo mismo. Su funcionamiento de agregar a usuarios igual
que Facebook (que lo compró en 2012 por mil millones de euros) o incluir hashtags para aglutinar temas hace esta
idea aún más sencilla. Los más de 100 millones de usuarios registrados en todo
el mundo pueden hacer que los idiomas se queden a un lado para comunicarse en
el lenguaje universal de la imagen. Y ahí es donde entra el sistema sanitario.
Usos de Instagram en la sanidad de Estados Unidos
En Estados Unidos, algunos hospitales ya utilizaron hace
unos meses para enseñar lo que sucede dentro de ellos. El Swedish MedicalCenter (Seattle) fue el primer hospital en informar en directo a través de
Instagram y Twitter sobre una operación de cirugía. El objetivo era proyectar
una imagen del centro quitando el misterio que a veces rodea a las
intervenciones y denotando transparencia. Otros invitan a pacientes a colgar
fotografías para recibir apoyos y sentirse más cercanos a las personas que
están lejos, y al propio hospital que los acoge durante su convalecencia. Es el ejemplo de CNMhospitals, que a través de
su cuenta recauda fondos y sensibiliza sobre los hospitales infantiles en
Estados Unidos.
Habría ahora que preguntarse si es extrapolable una idea así
ahora en un hospital español cuando muchas de las personas de nuestro alrededor
están colgando fotos constantemente en Instagram o si deben esperar a que pase
más tiempo para lanzarse a dar un paso
adelante. Solo queda esperar a ver quién da un paso al frente.