La Sociedad Española de Acústica organiza desde 1996, cada último miércoles de abril el Día Mundial contra el Ruido, con un claro objetivo: sensibilizar a la población que los sonidos molestos e irritantes que son perjudiciales tanto para la salud y para el propio entorno. Precisamente uno de los lugares más vulnerables a la perjudicial contaminación acústica son los centros sanitarios. Por ello hoy nos planteamos ¿Qué puede hacer la tecnología aplicada a la salud para conseguir una #SanidadSINruido? Participamos en la iniciativa llevada a cabo por @FFpaciente aportando este artículo. Como apuntan en su web sobre este asunto:
Durante mucho tiempo se ha hecho a través de cartelería o folletos. La importancia de guardar silencio, sin embargo, no debe hacer calado tanto cuando todavía es un problema real en el día a día de los pacientes, por lo que hay que repensar el planteamiento si se quiere acabar con esta insatisfacción. Además, al problema real, se le han sumado los nuevos dispositivos tecnológicos, casi todos acompañados por algún tipo de ruido. Y la propia cultura del ruido y del escándalo, tan propia de los países del sur de Europa, que nos arrastra hacia una contaminación acústica imposible de obviar.
Como solemos hacer desde este blog, siempre buscados la perspectiva tecnológica y lo que la revolución TIC aplicada a la salud puede hacer en forma de búsqueda de soluciones. Hoy nos imaginamos las armas que tenemos para combatir la cultura del ruido en los centros sanitarios, dando por hecho que siempre hay que tener educación e intentar no molestar a las demás personas en estos lugares, como primeros principios. Aquí van algunos consejos:
Restringir el uso de smartphones
Se hace en muchos lugares, como son cines, teatros, aviones, etc. Pero parece que en la sanidad aún no hemos cambiado el chip, aunque en alguno centros hay unos tímidos carteles ¿Es momento de hacerlo ahora? Con un uso más responsable por parte de todos de los dispositivos con sonidos y una política más estricta no se molestaría tanto al paciente. Sonidos de mensajes, de llamadas, conversaciones telefónicas infinitas... Cuando se va al especialista, esperando en Atención Primaria, al visitar a alguien en una habitación compartida... La tecnología nos ha dado muchas cosas, pero algunas se puede regular para que no molesten a los demás, o que sean usadas de una forma responsable y no molestando al prójimo, que en muchos casos, no conocemos.
Educar focalizando en el ruido ambiental
La educación en salud es muy importante y se debería focalizar una parte también en la disminución del ruido ambiental. ¿Realmente las personas que acuden a los centros o trabajan en ellos son conscientes de lo que el ruido ambiental supone? ¿Son conscientes de las medidas que se pueden tomar para disminuir la contaminación acústica que exista? Hay una necesidad de educar en salud mirando a la contaminación acústica e implicando a los afectados.
Campañas de difusión por nuevos canales
Todos hemos visto un cartel de una enfermera con el dedo en los labios señalando la importancia de estar callado. Un cartel que ya queda para la posteridad como la forma en que se pedía guardar silencio en décadas pasadas. Con todos los nuevos canales que Internet ha facilitado y en la que los usuarios (y potenciales pacientes de la sanidad) están en ellos, las campañas de difusión masiva pueden ser un buen aliado: redes sociales, contenidos en portales y medios de comunicación online pueden contribuir a concienciar a los usuarios de la importancia del buen uso de los aparatos electrónicos en centros de salud y de la importancia de no hacer ruido "cuando se va al médico".
Estas son algunas de las propuestas sobre las que había que trabajar más y preparar acciones coordinadas que impliquen a actores de todos los ámbitos para introducir en la cultura del respeto acústico a los pacientes en nuestro día a día.
Por una #SanidadSINruido tecnológicamente respetuosa ¿Tú qué propondrías?
"Los pacientes frecuentemente mencionan en las encuestas de satisfacción a los ruidos molestos como una de las principales razones de su insatisfacción con la atención sanitaria recibida, este ítem ya se recoge en muchas de las encuestas de que se le realizan a los pacientes para conocer el grado de calidad percibida. Por tanto el ruido se puede encuadrar dentro de la dimensión del confort del paciente con las infraestructuras sanitarias, junto con el nivel de limpieza, climatización, luminosidad, etc."
Durante mucho tiempo se ha hecho a través de cartelería o folletos. La importancia de guardar silencio, sin embargo, no debe hacer calado tanto cuando todavía es un problema real en el día a día de los pacientes, por lo que hay que repensar el planteamiento si se quiere acabar con esta insatisfacción. Además, al problema real, se le han sumado los nuevos dispositivos tecnológicos, casi todos acompañados por algún tipo de ruido. Y la propia cultura del ruido y del escándalo, tan propia de los países del sur de Europa, que nos arrastra hacia una contaminación acústica imposible de obviar.
Como solemos hacer desde este blog, siempre buscados la perspectiva tecnológica y lo que la revolución TIC aplicada a la salud puede hacer en forma de búsqueda de soluciones. Hoy nos imaginamos las armas que tenemos para combatir la cultura del ruido en los centros sanitarios, dando por hecho que siempre hay que tener educación e intentar no molestar a las demás personas en estos lugares, como primeros principios. Aquí van algunos consejos:
Restringir el uso de smartphones
Se hace en muchos lugares, como son cines, teatros, aviones, etc. Pero parece que en la sanidad aún no hemos cambiado el chip, aunque en alguno centros hay unos tímidos carteles ¿Es momento de hacerlo ahora? Con un uso más responsable por parte de todos de los dispositivos con sonidos y una política más estricta no se molestaría tanto al paciente. Sonidos de mensajes, de llamadas, conversaciones telefónicas infinitas... Cuando se va al especialista, esperando en Atención Primaria, al visitar a alguien en una habitación compartida... La tecnología nos ha dado muchas cosas, pero algunas se puede regular para que no molesten a los demás, o que sean usadas de una forma responsable y no molestando al prójimo, que en muchos casos, no conocemos.
Educar focalizando en el ruido ambiental
La educación en salud es muy importante y se debería focalizar una parte también en la disminución del ruido ambiental. ¿Realmente las personas que acuden a los centros o trabajan en ellos son conscientes de lo que el ruido ambiental supone? ¿Son conscientes de las medidas que se pueden tomar para disminuir la contaminación acústica que exista? Hay una necesidad de educar en salud mirando a la contaminación acústica e implicando a los afectados.
Campañas de difusión por nuevos canales
Todos hemos visto un cartel de una enfermera con el dedo en los labios señalando la importancia de estar callado. Un cartel que ya queda para la posteridad como la forma en que se pedía guardar silencio en décadas pasadas. Con todos los nuevos canales que Internet ha facilitado y en la que los usuarios (y potenciales pacientes de la sanidad) están en ellos, las campañas de difusión masiva pueden ser un buen aliado: redes sociales, contenidos en portales y medios de comunicación online pueden contribuir a concienciar a los usuarios de la importancia del buen uso de los aparatos electrónicos en centros de salud y de la importancia de no hacer ruido "cuando se va al médico".
Estas son algunas de las propuestas sobre las que había que trabajar más y preparar acciones coordinadas que impliquen a actores de todos los ámbitos para introducir en la cultura del respeto acústico a los pacientes en nuestro día a día.
Por una #SanidadSINruido tecnológicamente respetuosa ¿Tú qué propondrías?