Hace unos años era impensable pensar que en durante un año, casi 10 millones de personas en España buscarían información sanitaria en Internet. Hoy, la realidad es muy diferente. Más bien, la realidad es esa, y todo indica que dentro de muy poco, ese porcentaje subirá. El paciente tradicional ha encontrado un canal en el que se mueve como pez en el agua, aunque a veces sea un océano inmenso de información.
Asegura el acceso a servicios y atención sanitaria a personas de cualquier género, sin importar su condición personal, raza o condición sexual, sólo con acceso a Internet.
2. Permite un intercambio de opiniones interactivo
Cualquier paciente puede intercambiar opiniones con otros pacientes, médicos u organizaciones sanitarias en la Red gracias a webs, redes sociales, foros, blogs o comunidades abiertas para establecer un diálogo con ellos.
3. Mejora la relación con su médico
Una fórmula tan sencilla como que sí el paciente tiene más accesible al médico, lo consultará más, y la relación entre ambos será más fluida, empezando por una mejora en la comunicación, por lo que se ganará en la calidad del trato en todos los sentidos.
4. Canaliza información fiable
El médico puede ayudar al paciente a hacer el filtrado o incluso hacérselo el mismo, con lo que conseguirá que el paciente acceda a información sanitaria mucho más fiable y revisada/filtrada por un médico, por lo que no buceará solo en el océano sanitario de Internet.
5. Forma al paciente
El hecho de que el paciente busque información, lo consulte con su médico, y éste le indique es un acto de formación del paciente en sí mismo. El paciente puede conocer gracias a este proceso dónde está la información de calidad y segura que necesita, y aplicarlo en sus propias búsquedas, por lo que el propio paciente será cada vez más autónomo en la gestión de su propia salud diaria, sin olvidar que siempre tiene un médico accesible, pero sin tener que consultarlo a cada paso, sólo cuando lo necesite o crea conveniente.
6. Agiliza su gestión del tiempo
Una de las ventajas más obvias. En un mundo en el que cada segundo cuenta, poder ahorrase tiempo en desplazamientos para consultas que no son de urgencias, resulta vital para la mayoría de los pacientes que están en Internet, que intentan resolver sus dudas desde su propio móvil o su ordenador, sin tener que desplazarse a ningún lado y sin invertir tiempo en ello. Desde la cita online hasta la segunda opinión médica, pasando por la consulta o el tratamiento online.
7. Personaliza mucho más su salud
Adaptar a su medida los servicios que realmente necesita, ahondando mucho más en los concretos que le van a servir y conseguir alinearse más con el médico gracias a un mejor canal de comunicación con el mismo, que repercutirá en la personalización de su plan de salud.
8. Ahorra costes
En plena coyuntura de crisis nacional, poder tener más servicios más personalizados a precios accesibles, es una de las mayores ventajas. Por ejemplo, acudir a un especialista privado presencialmente a realizar una consulta es más costoso que realizarle una consulta onilne.
9. Neutraliza distancias
Asegura el acceso a información y servicios sanitarios de calidad a cualquier persona, sin importar su localización geográfica, esté donde esté.
10. Aumenta la seguridad
La seguridad del paciente se verá aumentada a través de todas las etapas del proceso sanitario. Más control, más herramientas, más seguridad. La realidad aumentada también empodera al paciente.
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