Los médicos que más practican el 2.0 en la eSalud española (Vol. VII)

Continuamos con la serie de médicos que utilizan los nuevos canales para realizar gran parte de su trabajo diario en el trato con el paciente y con sus propios compañeros u otros actores. Tras la sexta entrega, continuamos añadiendo nombres con la séptima parte de la serie.

Raquel Blasco (@RaquelBlascoR)
Raquel Blasco es uno de esos ejemplos de como un médico puede disfrutar con su trabajo también en el nuevo entorno propiciado por las TIC. Doctora en Medicina, internista de profesión y con una fuerte vocación en el mundo de la salud en el deporte, en el que es especialista y que se desprende de la mucha de la información que comparte tanto por su twitter personal (muy recomendable) como en su blog de wordpress

Raquel es una auténtica influencer en su campo y se encarga de un blog en el que ofrece consejos, información y análisis sobre muchos aspectos relativos a su especialidad, donde el usuario lector puede encontrar información muy útil.





Gonzalo Barrantes (@GonzaloBarrant1)
Gonzalo Barrantes es otro de esos médicos que ha decidido ponerse tanto la bata de médico como el traje de emprendedor. Este traumatólogo especializado en el pie y el tobillo además de su trabajo en el hospital ha decidido embarcarse en el proyecto Doctor eBooking, de la que es socio fundador, al mismo tiempo que también está involucrado en otro proyecto online como Pieytobillo.es.

Barrantes tiene claro el modelo a seguir por los médicos en los nuevos canales, no solo desde la perspectiva del mismo médico, sino también el empresario que crea un modelo de negocio para beneficiar la binomino profesional-empresa-paciente.






María José Herraiz (@mjherraiz)
La Dr. Herraiz es otra de esas profesionales sanitarias que ha decidido atreverse con los nuevos canales online. María José Herraiz comenzó en el 2.0 por una baja médica debido a una enfermedad crónica. Abrió el interesante y cercano blog Médico y paciente, una cuenta en Twitter y un perfil en Facebook. 

Su capacidad de aunar humanidad y tecnología es uno de los rangos distintivos de una médico de urgencias participativa en el nuevo entorno como pocas, motivada y preocupada por ayudar a sus pacientes. Solo hay que leer sus tuits para darse cuenta, y ver cómo es un claro ejemplo de profesional sanitario que sabe reciclarse en los nuevos canales, y entenderlos.






Joan Carles March (@joancmarch)
Una de las personas que mejor conoce las necesidades del paciente actual en los nuevos canales y fuera de ellos es sin duda Joan Carles March, uno de los máximos defensores del empoderamiento del paciente para mejorar el sistema sanitario y a la vez la percepción del usuario del mismo. 

Desde la Escuela de Pacientes trabaja día a día con ellos y para ellos, utilizando muy bien todo el potencial que los nuevos canales otorgan.  Este médico mallorquín, afincado en Granada, tiene un discurso adelantado a su tiempo lleno de ideas que son todavía ciencia-ficción para las administraciones y los más férreos seguidores de la relación médico-paciente más tradicional.





Sergio Fernández Ureña (@sfernandezurena)
Sergio Fernández Ureña es otro pediatra auspiciado por el auge de la pediatría online en España, que ha llegado a los nuevos entornos a preparar y atender a pacientes desde ya. 

Pediatra y puericultor. Defensor de la lactancia materna y la crianza natural. Ejerciendo la pediatría respetuosa tanto físicamente como de forma online, ya que tiene una consulta abierta. Muy activo por redes durante todo 2014, en las que comparte información de mucho interés para pacientes.






Los médicos que más practican el 2.0 en la eSalud española (Vol. VI)

La eSalud avanza, y los médicos que la componen, también. Por eso retomamos la serie de médicos que utilizan los nuevos canales y las nuevas herramientas proporcinadas por las TIC para ampliar su espectro de acción con los pacientes y con otros actores sanitarios. Tras 5 entregas en 2013, con las que conformamos el listado de 25 médicos más 2.0 de la eSalud española según este blog, continuamos añadiendo más nombres de actores de la eSalud con la sexta parte de la serie.

Sergi Godia (@sergiue)

Sergi Godia es uno de esos médicos capaces de mostrar su marca personal en Internet desde el primer momento. Un ferviente creyente de que la distancia entre profesionales sanitarios y pacientes se acorta gracias a la eSalud, siempre dispuesto al debate.

Innovador, comunicador y siempre mirando al futuro con optimismo, un valor muy en alza en un ámbito que no para de cambiar, pero sin perder la perspectiva crítica con todo el auge de nuevas tendencias en la eSalud. Está involucrado directamente en Lleida Salut y Medkia. 

Su blog, muy conceptual, no tiene desperdicio, y su capacidad para entender las ventajas y valores de la gestión online de pacientes, tampoco. Ofrece consulta online y siempre está aportando un debate constructivo desde su cuenta de Twitter. 


Mónica Moro (@MonicaMoro)


Mónica Moro no necesita presentaciones. Una todoterreno omnipresente en todo lo que haga referencia a la eSalud. Como ella misma se define, "Médico inquieta y apasionada. Comunicación y e-business en una farma. Administradora de Wikisanidad y coimpulsora de la iniciativa #CarnavalSalud". 

Moro siempre se presenta dispuesta a debatir sobre temas relacionados con este ámbito, por lo que se podría decir que es la animadora más relevante de la eSalud española, tanto desde su blog como desde cualquier red social o evento, en los que participa poniendo una pasión que a muchos les falta.  




Juan Toral (@juatorsan)


Las nuevas generaciones de médicos quieren conducir el cambio, y formar parte de él, en todos los canales. El ubetense Juan Toral Sánchez está haciendo eso mismo desde Las Palmas de Gran Canaria. 

Adjunto Urgencias Hospital Dr. Negrín, es un impulsor de los médicos de cabeceras online, y así lo de muestra en su web y en sus redes sociales. Un defensor del e-Paciente y de los beneficios de la salud 2.0, que sabe conducir al paciente tradicional por los nuevos canales con la confianza que necesita. Necesitamos más Juanes. 






Manuel Fernández (@INANP1)
Manuel Antonio Fernández es uno de los artífices del Instituto Andaluz de Neurología Pediátria (INANP), a través de cual está trabajando duro para poder ofrecer a los padres más favorables a las TIC canales seguros y servicios optimizados. 

A pesar de no ser un rostro tan conocido ni tan activo en redes, realiza un trabajo muy alineado con las TIC y las nuevas necesidades del paciente en su día a día desde el INANP. Fernández está ligado también al proyecto de consulta online para médicos de la plataforma Qoolife, y escribe sobre neurología pediátrica en algunos portales especializados. 






Biel Moragues (@bmoraguess)
Biel Moragues es Médico en Medicina Familiar y Comunitaria y también es un activo en la blogosfera sanitaria española a través de diversos proyectos y blogs en los que participa constantemente. 

Moragues es artífice del blog Trencadors docent, blog donde resuelve casos clínicos en Atención Primaria, y del blog Consulta Jove Trencadors, sobre salud, sexo y drogas en jóvenes. Además, su también publica junto a otros profesionales el Blog del Hipertenso, centrado en la salud cardiovascular para pacientes y profesionales. Su cuenta de Twitter es un recopilatorio de datos curiosos y muestra gran visión y capacidad para poner en liza lo que le interesa al paciente.




¿Qué te parecen estos médicos? ¿Los conocías?  ¿Crees que un
 médico si no tiene un blog o Twitter no puede ser considerado dentro de esta clasificación?

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5 eBooks para comprender lo que es la eSalud

Los últimos meses han sido medianamente productivos en lo que a creación de eBooks relacionados con algún aspecto sobre la eSalud en nuestro país se refiere. El auge de su publicación responde a la visión y necesidad de varios actores sanitarios que han decidido plasmar su sabiduría, experiencias o información de sus blogs en publicaciones digitales para ganar accesibilidad y difusión de su labor gracias a un nuevo canal.

Por eso, desde este blog queremos destacar algunos eBooks que nos parecen interesantes, diferentes entre ellos y a tener en cuenta para entender un poco más todo lo que aporta la eSalud al paciente.

Manual de inmersión 2.0 para profesionales de salud
Uno de los eBooks que ha abierto camino en el marco del proyecto Salud Conectada, creado por el enfermero Chema Cepeda. Este eBook es un manual muy completo sobre las nuevas herramientas y los usos profesionales que la tecnología ha implementado a la salud. El manual está pensado para cualquier profesional sanitario, tanto para los que tienen muchos conocimientos como para los que no tienen tantos, y pensado para realizar una inmersión progresiva que anule cualquier resistencia de entrada a los nuevos canales. Descárgalo aquí. 





eSalud para sanitarios
El pediatra líder en difusión en el mundo en español ha publicado este verano su eBook 'eSalud para sanitarios', en el que explica su propia experiencia en los nuevos entornos creados a partir de la irrupción de las TIC. Un relato interesante y llamativo de cómo un profesional sanitario puede convertirse en el mejor posicionado en Google en su especialidad haciendo lo que sabe con sus propias manos. Un libro gratuito ideal para profesionales sanitarios que quieren dar ese paso que les falta para servir a sus usuarios a través de Internet.  Descárgalo aquí






Conversaciones sobre eSalud
La OPS/OMS (Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud) ha aprovechado este verano para publicar un eBook diferente pero que ya muestra al menos el interés de alguna institución por la concepción de la eSalud como una herramienta, en este caso, para conseguir una sanidad accesible y universal. Doce capítulos en los que presenta la opinión de especialistas, lecturas recomendadas y experiencias exitosas en eSalud en campos como la seguridad del paciente, la telemedicina, registros electrónicos o políticas aplicadas en eSalud.  La obra, en formato electrónico, presenta las conclusiones del proyecto e incluye entrevistas con los autores de las conversaciones y tweets diseminados a través de Twitter. Descárgalo aquí. 



Alfabetización en salud
Otra propuesta diferente sobre un libro colectivo que aborda, desde múltiples enfoques, disciplinas y sensibilidades, el complejo proceso de transformar la información y el conocimiento en decisiones prácticas, con resultados tangibles en cuanto a ganancias en salud. Un eBook que marca el proceso de pasar de la información a la acción, y aunque no se centra explícitamente en la eSalud, si aborda el inminente futuro al que se enfrenta la salud, marcado por la tecnología. Descárgatelo aquí.







Primer ensayo sobre la eSalud española
La aportación de este blog a la comprensión de lo que es la eSalud y cómo afecta al nuevo rol entre médico y paciente viene de la mano del Primer ensayo sobre la eSalud española, una aclaración del concepto y de su relación con otras tendencias, además de reflexionar sobre los caminos por los que podrá implantarse, siempre con un foco especial de cara al médico y al paciente. El libro además es solidario y con cada descarga contribuyes a un proyecto de telemedicina de la Fundación Recover, hospitales para África. Descárgalo aquí 







¿Conoces algún eBook más que explique conceptos de la eSalud? ¿Cuál es? 

Ensayos sobre la eSalud: el estigma de la tecnología ¿Un lastre?

"No todas las personas perciben de la misma manera. Algo muy evidente pero de lo que no siempre se es consciente". 
Con esta reflexión retomamos el pulso tras el verano.

Los actores que están dentro del círculo de la eSalud tienen muy claro que la tecnología es una gran aliada para mejorar la calidad de vida, tratamiento, diagnóstico, etc., pero... ¿Y los que están fuera? ¿Lo perciben de la misma manera? Es difícil de ver para los actores de ambos lados (los que están fuera y los que están dentro) lo que sucede en el otro, y entenderlo, aunque a veces nos parezca lo contrario. Una afirmación que puede chocar a muchos pero si no fuera así, realmente no habría dos lados.

La tecnología, en general, supone para muchos todavía una barrera que en muchos casos no tienen la intención de derribar. Y en particular, si la aplicamos a la salud, se convierte en un muro que para muchos no es infranqueable, sino que simplemente no quieren franquearlo. Esta situación existe, y está mucho más cerca de los defensores y prescriptores de la eSalud de lo que nos creemos.

La tecnología, desde su nacimiento, siempre ha sido algo frío, impersonal, poco cercano. Sin embargo, el auge de las TIC más recientemente ha introducido el factor comunicación, y por tanto, el factor comprensión, que lleva a la vez el factor cercanía incrustrado. Eso ha hecho que la tecnología, en el campo de la salud, consiga hacer algo en lo que muchos posiblemente hace 15 años no creían: verla como algo cercano, que incluso puede ser casi intrínseco a la persona, ya que se nace y se crece (los más jóvenes) con ello en su día a día.

Sin embargo, el debate sobre si algún día se verá intrínseco o no, es prematuro. El debate sobre el que nos debemos centrar es por qué algunas personas ven todavía el hecho de usar la tecnología para mejorar la vida de alguien como algo estigmatizado, lo que supone un auténtico lastre para la eSalud ¿Creéis que no sucede? 

Hace poco leía que un dentista explicaba que todos los pacientes saben que usar el hilo dental es muy positivo para los dientes y encias, pero la mayoría de sus pacientes no lo usa, por lo que el porcentaje es bajísimo. En cambio es altísimo el porcentaje de pacientes que acuden a él por no usarlo. Un claro ejemplo de algo que se sabe que es positivo pero que no se hace.

Argumentos anti eSalud

En la eSalud seguro que tenemos muchos ejemplos como este, pero por alguna razón, la introducción de la tecnología a la vida diaria, se esquiva. ¿No hace eso también que esquivemos una mejor calidad de vida? Esta pregunta se me planteó este verano al ver en primera persona como algunos padres rechazaban rotundamente que sus hijos, afectado por diabetes tipo 1, utilizaran una bomba de insulina porque, según dijeron, "no querían que estuvieran conectados a una máquina" o "no fueran considerados robots".  Solo por ese motivo, no porque no funcione o no les vaya bien. Sin haberlo probado...  Tal cual el estigma del "loco" porque va al psicologo o el "sidoso" porque tiene una enfermedad venérea. 

La reflexión que se me presenta desde ese momento es ¿Así ven las propuestas de la tecnología para mejorar el tratamiento y calidad de vida de sus hijos? Está claro que si a eso le sumamos las personas que no quieren ni oir hablar de la rehabilitación a distancia "porque hay que ir al hospital a que te vea el médico", la consulta online "porque no se cura a través de un ordenador" o los wearables "porque no me voy a poner una tontería en el brazo para medir nada" tenemos una barrera clara, que no deja de ser un estigma sobre la concepción de la tecnología para una parte del paciente del presente, y del que será en el futuro.

Aunque nos parezca que la tecnología no es un estigma ni un lastre para la eSalud (porque para nosotros no lo es) debemos pensar que no todas las personas perciben de la misma manera. Y reflexionar sobre cómo abordar a las que no lo hacen para hacerles entender que la realidad ha cambiado. Y va a cambiar mucho más.  

¿Crees que la tecnología en la eSalud es percibida como un estigma aún para muchas personas? ¿Crees que no? 

57 artículos en 7 meses de eSalud...

El 31 de julio es buen día para hacer balance con cierta visión de los que han sido los primeros meses del año.'La eSalud que queremos' para dos meses al año, en agosto y del 15 de diciembre al 15 de enero. Mañana llega de nuevo nuestro descanso y nos vamos a él recordando los 56 artículos de eSalud que hemos publicado desde este enero. Aquí os los dejamos para que los releáis, los leáis sino los habéis leído y reflexionéis sobre algunas de las cuestiones que hemos planteado.

ENERO 


FEBRERO


MARZO


ABRIL


MAYO


JUNIO


JULIO



Médicos de un futuro actual

“El futuro no existe, el único futuro que hay es el mismo presente”. Una vez alguien me dijo esta afirmación mirándome a los ojos y se me quedó grabada a fuego en alguna parte de mi mente. Me descolocó, me hizo pensar. Y darle vueltas a las cosas suele ser positivo en la mayoría de las ocasiones, sobre todo cuando se hace buscando una respuesta. Una frase que me hizo dudar desde aquel momento hasta hoy. Siempre mirando hacia el futuro, ideando cómo sería, preparándome para él. Y cuando por fin creo que estoy preparado, una simple reflexión (o no) me hace darme cuenta de que ese futuro ansiado y para el que me he estado mentalizando durante mucho tiempo, no es más que el mismo presente. 
La era tecnológica en la que vivimos sumergidos se adapta muy bien a esta frase. Muchas posibilidades, muchas nuevas herramientas, canales, opciones, tecnologías… Todo el mundo preparándose para un futuro que mejorará nuestras vidas, las hará más fáciles, más accesibles, pero que nunca sabemos cuándo llega exactamente. ¿El futuro es todos los días?

Este escenario que planteo sucede en muchos ámbitos. Uno de ellos es la venerada, codiciada y hasta hace poco cuidada sanidad. Y lo planteo a las puertas de una sanidad nueva, empoderada, deseosa de nuevos caminos que la ayuden a seguir siendo todos esos adjetivos que acabo de citar. Una sanidad empoderada, lo que se conoce como la eSalud, o lo que es lo mismo, la aplicación de la tecnología a la sanidad y todo lo que aquella hará por esta.

Si preguntas a cualquier experto en la materia sobre esta duda temporal te dirá que tendrá lugar muy pronto, justo cuando llegue “el futuro”.  Ante esa respuesta, desde mi perspectiva cómo actor de la eSalud que ocupa el rol de comunicador y, a la vez, de paciente que se está empoderando, me surge otra pregunta: ¿No existe ya ese futuro de la sanidad que tanto se esperaba y del que tanto se habla?

Tanto centrarnos y focalizarnos a veces en ese supuesto futuro (que repito, si existe, algún día será el propio presente) no deja ver con claridad la importancia de las cosas que ya están sucediendo, el presente de las cosas, el presente de la eSalud. En definitiva, ese modelo con el que sueñan muchos y que para algunos, que se atreven y dan un paso adelante, ya es una realidad. Un presente, un futuro, pero actual. Su día a día en 2014 y no, por ejemplo, en 2015, por citar algún año del calendario próximo.

eSaludKnowmada: iniciativa pionera  

Bienvenidos a ese futuro actual. De él os quiero hablar y de él habla este eBook denominado ‘eSalud para sanitarios’, escrito por un pediatra nada común en el presente, pero que será muy común en el futuro (para los que creen que sí existe). Hablo de Jesús Garrido.

Garrido es un pediatra al que me gusta calificar de “adelantado a su tiempo”. De eso doy fe. Y no lo doy porque sepa lo que va a pasar en el futuro, sino porque he visto cómo es capaz de implementar en su día a día profesional y actual cosas que la gente espera que sucedan en el futuro. Y usarlas. Y hacer que se usen. Y hacer que sus pacientes estén cada vez más contentos. Y que sean más y sepan más.

Para hacer esto, Garrido se basa en su propia experiencia personal no solo en la sanidad,  sino también en Internet. Y aquí radica uno de sus puntos más importantes. En un modelo tradicional, un médico solo tenía que dominar un campo, el de la medicina. Formado para ello durante años de estudio y años de experiencias prácticas, si dominaba la medicina, tenía casi todo a su alcance para triunfar en la misma.

Sin embargo, la propia experiencia personal, a veces, no suele bastar. Y hoy día, con las TIC en nuestra mano, hace falta algo más. En la sanidad actual, un médico no solo necesita saber de medicina, sino que también tiene que saber de las TIC. Guste o no guste, es así.  La tecnología, y por consiguiente, Internet, han democratizado tanto el mundo, que hay que dominarlos a ambos. ¿Por qué? Por una razón muy sencilla: los pacientes (lo más importante para un médico) han decidido que este nuevo canal va a ser muy importante para ellos. Por tanto, darle la espalda a este nuevo canal es darle la espalda a los pacientes.  Y lo que es más, a sus necesidades. Y de forma indirecta, al progreso. Algo inviable para un médico que quiera ser buen médico. Al menos desde mi punto de vista de paciente que quiere ser paciente empoderado.

Algunos médicos (y este caso hablo de médicos, aunque sería extrapolable a otros actores sanitarios) han entendido el cambio de paradigma rápido y el cambio que puede suponer para ellos una revolución como Internet. No solo como mero canal informativo (un límite en el que de momento se quedan atrapados muchos), sino como herramienta para abarcar más y ser capaces de llegar a más pacientes, prestar un mejor servicio y, por supuesto, generar más ingresos, en este trinomio básico y necesario que significa trabajar en lo que te gusta, hacerlo con todos los recursos y garantías posibles y ser capaz de vivir de ello.

Y saber de este nuevo canal no es saber de redes sociales o tener un blog.  Con eso no basta. Es mucho más. Es saber optimizar las nuevas herramientas. Saber identificar qué sirve y qué no sirve a un médico en su relación con el paciente. Saber leer las necesidades de un paciente no solo si se está sentado enfrente de él.

Esta labor es muy difícil, y experiencias de éxito, rigurosas, amplias en cuanto a impacto y de las que se pueda aprender, hay más bien pocas. Una experiencia de éxito no es un informe de una marca que dice lo que le interesa decir o lo que le han dicho que diga. Una experiencia de éxito son datos que avalen que lo que se está haciendo y cómo se está haciendo, beneficia a muchos usuarios finales. Son pacientes consumiendo un servicio de salud que les sirve. Y no a uno, ni a tres, ni a 300. Si me apuráis ni a 3.000. Sino a muchos.   
Una experiencia de éxito puede ser más cosas. Puede ser saber divulgar, explicar, atender y prescribir fuera de ese espacio físico al que hemos estado acostumbrados desde siempre, que ahora no se excluye, sino que se complementa con otro nuevo espacio físico-virtual, o directamente virtual, que un médico no debe ver como un enemigo, sino como una nueva vía, una ventaja que aprovechar cuando quiera hacerlo.  Y también es saber atraer a esos pacientes y a otros profesionales sanitarios a este nuevo espacio. 
Siempre he pensado que el que no arriesga no gana, y que tomar un camino que puede parecer arriesgado puede traer más ganancias, espirituales y económicas, de las que se piensa de un principio, y puede ser un trabajo mucho más agradecido que quedarse en la zona de confort. El puericultor Jesús Garrido se atrevió a hacer algo diferente hace años, y aunque ahora parezca fácil tener sus visitas y posicionamiento online, no lo es. Sin embargo, su trabajo está dejando un surco, una pisada en la arena, una guía que seguir que se puede aprovechar y adaptar a cada uno.

Por eso os invito a todos los queráis arriesgar en vuestro camino profesional que hagáis algo que no está bien visto: copiarle. Sí, os animo a que le copiéis. No al pie de la letra, obviamente, pero a que hagáis vosotros lo que él se atreve a hacer adaptándolo a vuestras circunstancias. Aprendiendo, probando, encontrando vuestro propio lugar. Eso es precisamente lo que propone con este libro: tenderos una mano.

Garrido propone dar las herramientas, crear una hoja de ruta para que cualquier médico u otro profesional sanitario pueda demostrar que el futuro que pensaste o con el que un día soñaste, sea tu presente. Ahora solo tienes que decidir si estás dispuesto a hacerlo y a seguir ese pequeño gran rastro que está dejando en el futuro actual.

Prólogo del eBook 'eSalud para sanitarios', escrito por Javier J. Díaz, autor de 'La eSalud que queremos'.

Ensayos sobre la eSalud: formación en eHealth ¿Hasta qué punto hace falta?

Vivimos en mundo en el que nos creemos que 'todos' lo sabemos 'todo'. Y si no es así, lo miramos en el móvil para saberlo. En ese tipo de mundos es difícil hacer autocrítica y echar la vista atrás para ver si realmente tenemos tanto conocimiento como nos creemos. Pues bien, lo que nos planteamos hoy es: ¿Está la eSalud en ese punto?

Los actores de la eSalud juegan un papel fundamental obviamente en la propia eSalud, y desempeñan cada vez más funciones. Sin embargo, la reflexión que planteamos es rizar el rizo un poco más. ¿Están capacitados para utilizar todos los recursos que la tecnología les propone? 

Artículo patrocinado por MPG Formación.
Está claro que cualquier profesional sanitario, por citar a un actor, está capacitado totalmente para desempeñar su función en el día a día, pero desde la llegada de la tecnología ¿También lo está para implementarla? Pensar en una respuesta que sea un 'Sí porque sí' no es la respuesta más inteligente. El profesional sanitario, para seguir con este ejemplo, debe aprender muchas cosas de la nueva implementación tecnológica, y en ocasiones, no dispone de todos los recursos para ello. En en este punto en el que nos planteamos de nuevo si realmente hace falta una formación para aprovechar todos los recursos existentes gracias a la eSalud.

Actores y formación

Un actor de la eSalud debe comprender no solo su lugar en el círculo de la eSalud, sino también sus acciones a realizar y su potencial, un nuevo mundo que se abre una vez empoderado un actor con las TIC. Y es difícil que lo comprenda por él solo, por muy autodidacta que sea. Por seguir con el ejemplo del profesional sanitario, si este actor quiere empeñar un rol activo como tal, tendrá que mejorar sus conocimientos en muchos aspectos, entre ellos la comunicación con el paciente, básica y clave en la eSalud, por el rol que ocupa este último y su creciente poder. 

¿Cómo lo puede hacer? De muchas maneras. Lo puede hacer solo, aprovechando recursos ya existentes o buscando formación directa sobre la materia, pero está claro que mientras mejor se forme más capacidades adquirirá para entender no solo lo que puede hacer, sino cómo lo puede hacer, y entender las nuevas vías que hay para ello, para optimizarse el mismo como actor y que repercuta de una manera positiva entre otros actores. 

Ante esta exposición, ¿existen los suficientes recursos para que un actor de la eSalud pueda formarse hoy día? Existir por supuesto que existen, al menos los mínimos impresdincibles. Existen diversos Másteres, cursos de empresas privados, talleres en jornadas relacionados de forma directa o indirecta con la eSalud. También existen recusos abundantes en la red provenientes de fuentes fiables (como el proyecto de programa de formación gratuito Campus Sanofi) y proyectos que están a punto de llegar, como la iniciativa basada en uno de los casos de éxito más llamativo y comprobado de uno de los actores de la eSalud española, el proyecto #eSaludKnomada, del que mañana mismo sabremos más cosas. 

Todos ellos ponen de manifiesto que sí existe y sí existe una demanda de los actores de la eSalud por formación, en un grado, de momento, moderado-alto, pero que a medida que se vayan implicando actores, crecerá con casi toda seguridad. 

Esta situación hace pensar que la formación, de calidad y con valores añadidos impartida por profesionales en cada una de las materias -y no por ese tipo de personas que lo saben 'todo de todo'- será básica para un correcto despegue de la eSalud desde hoy hasta el futuro más inmimente. ¿Se puede estar sin formarse en nada capacitado para hacer de todo? No cometamos el error de creer que sí.     

¿Hasta qué punto crees que hace falta la formación en eSalud? ¿Te atreves a cualificarlo? ¿Crees que sin formarte en nada estás capacitado para hacerlo todo?

Wearables en la eSalud ¿Moda o realidad con mucho futuro?

La tecnología wearable está dando mucho de qué hablar en el ámbito de la eSalud mundial. Desde hace unos meses mucho se habla en España sobre el binomio eSalud y wearable, cada vez más presente en el día a día de los que confían en las TIC como mejora. La 'ropa tecnológica' o 'ponible' está siendo cada día más habitual, y está creciendo en 2014 a un gran ritmo. Sin embargo, como todo lo que sube, corre peligro de bajar, y convertirse en una moda pasajera, algo que hay que evitar. ¿Lo lograremos?


wearables y eSalud


Como ya dijimos hace una semana en este blog, tras el auge de las Apps de salud, los wearable han visto como son capaces de introducir muchas funciones de las Apps en las actividades del ser humano y convertirse casi en un complemento de ellos. Sin embargo, el reto, como bien aportaba la mente inquieta de Rafa Pardo en una de nuestras entradas, es "que no se noten", y que se integren plenamente en nuestras vidas. 

Necesidad wearable

Entonces, ¿Vamos por el buen camino? Parece que sí si consiguen establecer sinergias con la eSalud y con los actores de ésta, para responder a verdaderas necesidades y no a necesidades infundadas, como dejó entrever Jesús Garrido hace unas pocas semanas en el programa de radio Onda Saludable. 

Carlos Mateos, director de COM SALUD, también se ha sumado al debate explicando a través de las redes sociales que "la irrupción de los wearables es inevitable" debido a que se van a "generalizar", situando en este caso el reto de los propios wearables en la capacidad de los profesionales de la salud de "aprovecharlos", para así convertirlos en una realidad con mucho futuro, y alejarlo de las temidas modas.  

Está claro que los wearables tendrán futuro siempre y cuando se entienda que tanto desarrolladores, empresas como profesionales sanitarios involucrados en el proceso de creación de los mismos y posterior monotorización de cara al paciente deben entender que el wearable tiene que aportar valor, responder a necesidades reales, implicar al paciente y lograr que el paciente no note que el propio wearable es un elemento externo, sino hacerlo suyo, como un paciente hace suyo otras cosas u otros elementos a los que incorpora a us vida, porque la mejoran. 


CONSULTA EL RESTO DE LA CUATRILOGÍA WEARABLE

Wearables en la eSalud ¿Un futuro lleno de sinergias?

7 aportaciones de los wearables a la eSalud







Los pilares del éxito de los wearables en la eSalud

La pregunta del millón en lo que hace referencia a los wearables en salud: ¿En qué radican el éxito de los wearables en la eSalud? ¿Tienes los actores de la eSalud claro dónde convergen sus necesidades son las soluciones que aporta la tecnología? ¿O de momento está siendo una tendencia más al uso y a esperar a ver qué sucede con ella? Tres preguntas sin respuesta aparente, pero que pueden ya tenerla.

wearables esalud


Así de simple y así de complejo. Por poder, se puede estar hablando de wearables, y diseñándolos, y fabricándolos, e incluso implementándolos días y días, meses y meses, años y años. En cambio, no servirá de nada hacerlo y trabajar en ese sentido si no se tiene claro el punto en el que la tecnología wearable es útil y aporta algún beneficio al usuario intermedio y al final.

Wearables en la eSalud

Para responder a la pregunta que nos planteamos al inicio de este artículo debemos fijar dos puntos que son muy importantes para obtener una respuesta positiva, y que aunque no son ningún secreto, a veces parece que no se tienen en cuenta:

1. El primer punto es que un wearable debe centrar su función en la capacidad de aportar valor, tanto al usuario final, como al profesional sanitario. Si un wearable no aporta un valor añadido, la tecnología que usa y su desarrollo no tendrán ningún sentido, y por muy llamativo que sea, no tendrá razón de ser, o al menos no debería tenerla.  

2. El segundo punto en el que nos centramos es la 'necesidad' de que responda a alguna 'necesidad' de los usuarios para los que va destinado. Es decir, si un wearable fabricado por la empresa de desarrollo más potente en eSalud, ideado por los profesionales sanitarios más cualificados, no responde a las necesidades de los pacientes, reales, en su día  a día, no aportará una solución ni nada útil al usuario final, por lo que no tendrá tampoco razón de ser. 

Si un wearable cuenta con estos dos pilares, el camino hacia que sea útil para todos los actores de la cadena de uso del mismo, incluyendo a los usuarios finales, podrán ver sus necesidades colmadas gracias a estos dispositivos, con lo que se justificaría su existencia, y se demostraría que su aporte tecnológico sí aporta algo más al proceso de todos los actores de la eSalud, haciéndolo útil para el usuario y dando un paso más hacia la usabilidad que deberían de tener.  

En otras palabras, los wearables no solo sirven para medir variables y variables y transmitirlas a un móvil, sino que esas variables medidas, monotorizadas y almacenadas deben conseguir servir de algo a la organización sanitaria, profesional sanitario para que realice alguna función útil sobre el beneficiario final. En caso de no ser así ¿Qué sentido tiene? 

¿Qué opináis de esta reflexión? ¿Creéis que es muy extremista? ¿Los wearables están en un periodo de prueba y hay que darles más cancha? 


7 aportaciones de los wearables a la eSalud

Los wearables están demostrando que pueden aportar mucho al ser humano, que pueden dotarlo de esa tecnología externa, e incluirla en sus acciones, en su día a día, de una forma tan sencilla como incluirla como prenda o complemento, como si se llevara una minicomputadora encima. Más allá del debate de si los wearables y la eSalud van a ir de la mano en un futuro no muy lejano, queremos destacar 7 aportes que los wearables pueden hacer a la eSalud.



Está claro que el éxito de un wearable radica en su capacidad de aportar valor y responder a una necesidad del usuario con un fin que le beneficie, y para ello, vamos a enumerar algunas aportaciones que los wearables pueden hacer a la eSalud.

1. Implicar al paciente  
Y con ello mejorar la adherencia al tratamiento. Uno de los grandes retos de todo sistema médico es conseguir que el paciente esté implicado, motivado y que así pueda responder a todos los tratamientos desde el principio hasta el final. Los wearables pueden realizar esta labor de motivación y acompañamiento. 
2. Ahorrar costes 
Uno de los mejores beneficios de la eSalud, el ahorro de costes, el hacer más cosas, llegar a más personas, invirtiendo menos, es también una de las características de los wearables. El ahorro de costes en relación a uso y resultados es uno de sus principales valores. Son sostenibles para implantarse y ser económicamente viables en un sistema sanitario donde la eSalud esté implementada, tanto en la mediciana privada como en la pública. 
3. Monotorizar datos sobre salud 
El hecho de llevar 'ropa tecnológica' beneficia al usuario. Los wearables no hacen otra cosa que registrar datos sobre la persona que los porta. Y esos datos puedes ser almacenados, analizados, consultados y monotorizados por el propio paciente o por un profesional sanitario para mejorar la salud del paciente y a la vez empoderar al mismo.  
4. Acceder a la información de forma inmediata 
Gracias a los wearables, esta monotorización de datos puede obtener datos a tiempo real que pueden ser muy útiles. Por ejemplo, un paciente que padezca una enfermedad puede tener datos relativos a parámetos sobre ella al instante, mientras está realizando alguna actividad. Esos datos, instantáneos, puedes recibirse e interpretarse también de forma instantánea por un profesional médico y por el propio paciente.  
5. Mejorar la conexión entre los actores 
El uso de wearbles puede mejorar la conexión entre el usuario que lo usa, el profesional sanitario u organización que puede recibir esos datos y el propio medio, tal y como ya ha pasado con otras tecnologías. 
6. Aumentar la productividad 
Un punto que puede ser controvertido y del que mucho se habla en cuanto a tecnología wearable. El hecho de conseguir, almacenar, monotorizar y archivar datos puedes hacer que aumente la productividad de las organizaciones, empresas, profesioniales sanitarios y usuarios finales de este tipo de tecnología, y con ello conseguir resultados más eficientes.  
7. Sistema de prevención 
Un escalón más allá quizás todavía, pero quién sabe si los wearables serán ese artilugio que nos avisará en el futuro de algún malfuncionamiento de nuestro cuerpo, con capacidad para adelantarse a algún síntoma antes de tenerlo. A pesar de que ya existen algunos capaces de predecir cánceres, por ejemplo, está por ver si con todos esos datos los wearables serán capaces en el futuro de ofrecer diagnósticos prematuros fiables. 

Está claro que los wearables pueden ser muy útiles a los actores de la eSalud, ahora falta ver  si esa conexión empieza a tener beneficios tangibilizándose y es útil.


CONSULTA EL RESTO DE LA CUATRILOGÍA WEARABLE

Wearables en la eSalud ¿Un futuro lleno de sinergias?

7 aportaciones de los wearables a la eSalud